Los conflictos
laborales forman parte de la realidad de una empresa, si
bien se pueden manifestar con más o menos asiduidad. Ante esta realidad podemos
actuar de forma reactiva y preventiva, por lo que si en su momento ya hablamos
sobre resolver éstos problemas, también es importante fijarnos en cómo evitar
o minimizar los conflictos.
El radio de acción de la empresa es limitado en
esta materia ya que no todos los problemas son previsibles o
habituales, aunque debe utilizar todas las herramientas a su alcance para que
no surjan conflictos como consecuencia de su falta de acción, además de tener
preparadas vías o protocolos de actuación Establezcamos una comunicación
anti-conflictoLa comunicación interna debe lograr que los empleados cuenten
con la información más relevante para el desempeño de sus
funciones en plazo y forma. Esto no significa mantenerles desinformados de los
aspectos negativos, sino que deben contar con elementos de juicio realistas.
Todo esto no es óbice para que además cuentan con información que no
corresponde directamente a su puesto de trabajo. En definitiva, debemos
tratarlos como miembros de un equipo que va más allá de su mesa y poner en
valor las cosas que se hacen bien al tiempo que se trata de mejorar lo que no.Dentro
de esta normalidad surgirán momentos “críticos” en
los que la comunicación es fuente de conflictos, ya sea por su mala gestión o
por su inexistencia. Esto es así porque la comunicación es la principal
herramienta que tiene una organización para articularse. Tengamos en cuenta
estas claves:
- En ocasiones es necesario desmentir los
rumores. No hacerlo puede alimentarlos
- No se comunicarán determinaciones
empresariales hasta que estas sean inequívocas y estén bien meditadas
- Un trabajador nunca debería enterarse de
asuntos que le atañen por medio de terceras personas
- Comunicaremos en privado los asuntos
individuales
- Los momentos más relevantes requieren
analizar la comunicación de forma más intensa: encargado de la
comunicación, momento, lugar y forma
- Aparcaremos la pasión aunque toquemos la
emoción. La probabilidad de equivocarnos aumenta de forma notable
No hay comentarios:
Publicar un comentario